La oportunidad del COSAC en la Movilidad y Calidad Urbana Limeña.

Llevo dos años en Barcelona, capacitándome y trabajando en temas de movilidad urbana y transporte. Desde el otro la del mundo, me mantengo al tanto de los proyectos de infraestructura urbana, vial y transporte de mi preocupante ciudad. Después de 5 años de arduos estudios, análisis, aplazamiento e indecisiones políticas, el esperado proyecto de autobuses de alta ocupación es una realidad y se espera que no se encasille solamente un proyecto de transporte, si no, el de un proyecto de movilidad urbana. Y es que habría que entender que los alcances que define la palabra “movilidad” en el contexto actual de la planificación y gestión urbana, tiene alcances mucho mas lejanos y complejos que lo referido a “transporte”, el cual también esta incluido. Mientras que la Movilidad se refiere a toda una colectividad de personas, objetos movibles y espacios físicos, el Transporte solo compete al traslado mecánico, sin tomar en cuenta el sector social más importante y abundante: Las personas (conductores, ciclistas, peatones, usuarios, pasajeros, etc). La movilidad garantizar el derecho de movilizarse, incluyendo una movilidad sostenible que adiciona los parámetros y efectos que involucra la manera de movernos (salud publica, medio ambiente, sociedad, económica individual y colectiva).

Después de varios años de análisis, evaluaciones y diversos estudios de todo tipo, los Corredores Segregados de Alta Capacidad (COSAC) por donde se desplazara el Lima Bus, se espera que alcance los retos que más que un sistema de transporte, sea un sistema de cambio y evolución de la calidad urbana local.

EL COSAC, debe alcanzar un funcionamiento eficiente (solución con un mínimo de recursos disponibles) y eficaz (máximo rendimiento de los recursos disponibles) que permita competir con otros sistemas masivos existentes, sobre todo en temas de costo de implementación y facilidad de cobertura. Debe favorecer a los distintos planes de ordenamiento territorial, descongestionamiento de centros, desmarginacion de suburbios, y la facilidad de acceso a diversos servicios y equipamientos. En conclusión, deberá tomar un papel estratégico en el desarrollo sostenible de la ciudad.

Un proyecto que si logra influir positivamente en los precios del suelo, rentas habitacionales y la rentabilidad comercial, será una gran posibilidad de mejorar la calidad urbana y de vida de la ciudad. Mejorar el desplazamiento rápido y mayor cobertura a varios puntos, mejora la seguridad, la contaminación, la salud, el espacio publico vial y colectivos con respuesta social positiva. Deberá ser un proyecto que si no descuida dichos alcances, hará milagros (siendo positiva) ya que podrá tener la gran oportunidad de cambiarle la cara a nuestra tan descuidada Lima. Pero el COSAC no es mas una pieza de un conjunto de herramientas de, un sistema de transporte urbano. No es solo un proyecto o 2 o 3 los que harán que una ciudad modifique su cultura de desplazamientos, sino, un conjunto de herramientas de planificación que necesitan ser trabajadas a nivel macro, como definir políticas y concretar instrumentos de planificación, como directrices, objetivos temporales, procesos operativos, indicadores de control, programas de inversiones, de servicios, de seguimiento y evolución. De no tomar las medidas necesarias, aunque se implemente un COSAC o un tren eléctrico los problemas continuaran y/o en su caso, aparecerán otros.